This post is available in English here |
Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad, TDAH. Estas siglas, con todo lo que conllevan, entraron como un terremoto en nuestra familia hace unos cuatro años. Antes de eso sabía bastante poco de esta “condición neurodivergente” que posee un porcentaje no despreciable de población.
Ahora no es que sea un experto en el tema, pero sí que conozco profundamente las implicaciones que tiene este trastorno en la vida de las personas que lo sufren. Y creo que puedo dar algunos consejos a personas que se encuentren en una situación a la que nosotros nos enfrentamos, con un diagnóstico reciente y con muchas, muchas dudas sobre el futuro.
Empezemos por el principio, describiendo brevemente cada una de las siglas. Tenemos por un lado, D y A, “Déficit de Atención”. Bien, fácil de entender, aparentemente son personas a las que les cuesta centrar la atención. Aunque al ir conociendo mejor esta condición neurodivergente te hace ir dándote cuenta de que no es exactamente que no puedan prestar atención, o que les cueste centrarse, pero bueno, como concepto general funciona.
Por otro lado, la H de “Hiperactividad”. Esto empieza a complicar las cosas, porque a veces está y a veces no. En ocasiones al Déficit de Atención le acompaña un exceso de energía difícil de controlar, que no se adapta a la situación (por ejemplo, en medio de una clase), que se denomina Hiperactividad. Imagina que tienes un mando de la tele. Normalmente, puedes subir o bajar el volumen según lo que necesites. En la hiperactividad, es como si el volumen siempre estuviera muy alto y el mando no funcionara bien para bajarlo. Entonces la persona se mueve aunque no haga falta, habla aunque no sea el momento, corre o salta en sitios donde debería estar tranquilo, y cosas así. No lo hace porque quiera molestar, sino porque su cuerpo y su cabeza están como con el motor encendido a tope y no es fácil apagarlo. Y luego tenemos lo más difícil, la T, de “Trastorno”. En el contexto de la salud mental, la palabra Trastorno no se usa para indicar “enfermedad” ni “defecto”, sino que se usa para señalar que los niveles de déficit de atención (DA) y/o hiperactividad-impulsividad (H) son lo suficientemente intensos y persistentes como para causar dificultades en la vida diaria: en los estudios, en el trabajo, en las relaciones o en la organización personal. Esto es lo más difícil de procesar y entender: existe una amplia variedad de intensidad o grado en lo que por otra parte no son más que rasgos de la personalidad. Todo el mundo puede ser despistado, moverse mucho o ser impulsivo a veces. Muchas veces es difícil distinguir cuándo puede llegar a ser un trastorno, y cuándo no es más que un rasgo marcado de su personalidad. Podría decirse algo así como que se considera un trastorno cuando estos comportamientos ocurren mucho más de lo habitual, para la edad, se repiten en diferentes entornos (no solo en casa, o solo en el colegio), o generan un impacto negativo claro en el rendimiento académico, laboral o social. No quiero desviarme a polémicas absurdas como la de que últimamente parece que el TDAH “está de moda”, y muchísima gente en redes sociales se identifica como TDAH cuando simplemente le cuesta organizarse, o tiene problemas en los estudios. Tampoco quiero entrar en debates sobre la necesidad o no de tomar medicación para tratar el TDAH. Como he dicho, hay infinidad de grados de DA y de H, algunos permiten vivir una vida normal y plena sin necesidad de diagnóstico ni medicación, y otros requerirán medicación psiquiátrica y tratamiento psicológico continuado. Lo que me interesa apuntar aquí es que hay una buena noticia: no importa el grado de Déficit de Atención o Hiperactividad que tengas, porque hay métodos sencillos y poderosos para ayudarte a organizar tu vida. Métodos que cambiarán tu vida completamente, y te permitirán centrarte, te permitirán concentrarte, te permitirán triunfar en lo que te propongas, bien sea pasar de curso, estudiar una carrera, o desarrollar tu carrera profesional. Varios de estos métodos son profundamente útiles también para personas sin TDAH, personas “neurotípicas”, si es que se puede usar ese término para las personas cuyo cerebro funciona y se desarrolla de una manera que encaja con lo que la sociedad considera “habitual” o “esperado” (son capaces de sentarse a estudiar, prestan atención en las reuniones de trabajo, etc, gente muy, muy aburrida). Entonces, seas team neurodivergente o team neurotípico, ¿estás preparado para que te cambie la vida? ¡Allá vamos!
1. Dormir bien
Lo que no se mide no se conoce. Y lo que no se conoce no se puede mejorar.
Diferentes aparatos para monitorizar y mejorar tu sueño.
2. Antes de intentar concentrarte: bloquea distracciones
3. Tu momento de concentración: el método Pomodoro
4. Bloquea tu canal auditivo: los pájaros de tu cabeza
Ruidos de fondo (Ruido Blanco, Rudio Rosa o Ruido Marrón): Son sonidos consistentes que abarcan un amplio rango de frecuencias o enfatizan las bajas frecuencias, como el sonido de la estática de una televisión, lluvia o una cascada. Estos ruidos crean un ambiente auditivo estable al enmascarar sonidos distractores, lo que puede mejorar el rendimiento en tareas y la atención sostenida en personas con TDAH.
- Música Instrumental: La música calmada, instrumental y de tempo medio es particularmente beneficiosa. La música sin letra permite una mejor concentración al evitar la interferencia de ésta en las capacidades de procesamiento verbal de tu cerebro.
Música Electrónica con Ritmos Constantes y Lo-Fi: Ciertos tipos de música electrónica ambiental, o géneros como el Lo-Fi, con ritmos constantes y modulaciones rápidas de amplitud, pueden ofrecer la estimulación adicional necesaria para la atención sostenida.
Las bandas sonoras de cine y videojuegos están diseñadas para favorecer la inmersión. Esta inmersión puede traducirse en una mejor concentración en la tarea y fomentar un estado de "flow".
Sonidos Binaurales: Se producen al escuchar dos frecuencias ligeramente diferentes en cada oído, lo que lleva al cerebro a percibir un tercer tono. Algunos individuos con TDAH reportan que mejoran la concentración y la relajación, aunque la evidencia de investigación es limitada y preliminar.
5. Hazlo social: el poder del acompañamiento responsable
- La responsabilidad compartida (accountability) – sentir que alguien más te acompaña (aunque sea virtualmente) – reduce la procrastinación y aumenta el compromiso. Ver a otros trabajando o estudiando en comunidad genera un “efecto espejo” que impulsa a mantenerse responsable.
- La reducción de la soledad – estudiar o trabajar solo puede ser desmotivador; unirse a otras personas proporciona compañía y sensación de comunidad.
- Estructura y ritmo – en muchos casos se buscan las rutinas claras, que ayuden a empezar y mantener la concentración
Conectarse con un “creador”, “organizador” o “mentor” de estudio. También se le podría llamar “streamer” o “youtuber” de StudyWithMe o de Coworking. Pero viene a ser todo lo mismo: una persona que aplica algún método de estudio o concentración de manera pública, y ayuda a los que se conectan a organizarse, les motiva, etc.
Muchas personas saben que estos métodos que te he descrito anteriormente funcionan, pero necesitan a alguien que se lo organice, les motive, o en cierta manera les obligue a ello. Es mucho más fácil seguir el método pomodoro si te unes a un grupo de personas que lo está haciendo, y si durante las pausas se puede hablar con algún chat o similar, es muy valorado por mucha gente.
Plataformas más usadas: - Youtube: existen canales con sesiones de estudio intenso pregrabadas, y otros que emiten en directo.
- Twitch: Plataforma diseñada para la emisión en directo, principalmente para Gaming, pero que cuenta con una numerosa comunidad #StudyWithMe o #Coworking.
https://www.twitch.tv/directory/category/co-working-and-studying
B. Concentrarse acompañado de una pareja de estudio: el efecto espejo o body doubling.
El "body doubling", pareja de estudio, o trabajo paralelo (no hay una buena traducción al español del término) es una estrategia utilizada para iniciar y completar tareas, que implica la presencia física o virtual de alguien, lo que hace más probable alcanzar los objetivos. La simple presencia de otra persona (o personas), que a su vez están concentrados intentando terminar sus tareas, cambia tu contexto psicológico y reduce fricciones típicas de la procrastinación. Saber que alguien te “ve” (aunque esté en silencio) eleva el coste de distraerte: no quieres quedar como quien no cumple. Esa presión suave crea compromiso y te ayuda a concentrarte antes y distraerte menos.
¿No te lo crees? ¡Pruébalo! Hay múltiples plataformas diseñadas para ello:
- Online: FocusMate, StudyStream o LifeAt
- A través de servidores de Discord. A pesar de que esta plataforma está más bien enfocada a otro tipo de comunidades, como el gaming, existen multitud de servidores en los que poder compartir la webcam y convertirlos en una sala de estudio / coworking.
Varios Ejemplos:
Cave of Languages (especializada para intercambio de idiomas)
indaGoodHouse. Sí, yo mismo he creado un servidor de Discord con salas de Estudio / Coworking, donde además de buscar parejas de estudio puedes compartir muchísimas cosas: la música que más te gusta para concentrarte, recursos para estudiar, consejos de productividad, apuntes, etc, o puedes pedir ayuda a toda la gente que ya hay allí, o compartir tus sentimientos para que la gente te acompañe cuando no tienes un buen día
Como ves, el hecho de que tengas dificultades para centrar tu atención y para avanzar en tus tareas no tiene por qué limitarte en tu vida, sea de estudiante o en tu vida laboral. Sólo tienes que organizarte, usar un método que te funcione, probando entre los que te he mostrado aquí y diseñando tu propio método personalizado.
Si crees que puedes tener TDAH, busca asesoramiento especializado, no pasa nada por ir al psicólogo y contarle tus dificultades, y si eso lleva a un diagnóstico de cierto grado de TDA o TDAH, que sepas que no estás solo/a, hay millones de personas por ahí luchando (y ganando) contra las mismas dificultades que tú.
Organiza tu vida, empieza por dormir mejor, es la base de tu salud mental; elimina distracciones para cuando necesites estar concentrado/a; divide tu tiempo en bloques de concentración total seguidos de pequeñas pausas, y celebra cuando cumplas alguna tarea con una recompensa, aunque sea pequeña; aísla tu canal auditivo del ruido exterior, y escucha lo que realmente te ayude a concentrarte; y comparte, comparte tus dificultades, comparte tus avances, comparte tu pantalla, comparte tus horas de estudio o de trabajo, ahí fuera hay alguien que necesita ver que tú estás avanzando en tu objetivo, le ayudará a cumplir el suyo.
Ese es el secreto de nuestro éxito, que es compartido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario